Corté uno esta mañana.
Parecen cables
blancos.
Podarlos, verlos aparecer.
Son más. Me muestran que pronto
no los voy a poder cortar
que serán miles y entrarán en mis ojos 
en las orejas en las fosas nasales.
Saldrán de las vértebras de las costillas.
Como una enredadera.
Me amansará
caminaré más lento
al paso de la luz en verano.